Artículo publicado hoy en el diario Gestión. Revise la versión original aquí.
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Google se enfrentó a airadas preguntas de legisladores británicos, que investigan sus asuntos fiscales y si el año pasado, cuando testificó en el Parlamento, entregó información engañosa.
El jefe de Google para el norte de Europa, Matt Brittin, volvió a presentarse ante el Comité de Cuentas Públicas del Parlamento luego que una investigación de Reuters mostró que la compañía empleó a personal en puestos de ventas en Londres, pese a que había dicho al comité en noviembre que sus empleados no vendían a clientes en Reino Unido.
Transferencias
Brittin dijo que la compañía estaba siendo ya investigada por la autoridad fiscal británica en relación con los precios de transferencia por el cobro de servicios entre Google del Reino Unido y otras compañías del gigante de
internet.
El ejecutivo dijo que creía que la empresa cumplió con la legislación fiscal británica a cabalidad.
También negó repetidamente haber engañado al Parlamento en noviembre, pero añadió que Google del Reino Unido estaba vendiendo más de lo que había dicho.
En noviembre, la empresa había dicho que “nadie en Reino Unido está vendiendo” y que Google Irlanda era la parte que contrataba las ventas en Reino Unido, y que el personal de la filial sólo estaba involucrado en actividades de promoción.
De 2006 a 2011, Google generó ingresos por US$18,000 millones de Reino Unido, según sus documentos, y pagó US$16 millones en impuestos.
EL DATO
Problema. La evasión de impuestos corporativos se es un asunto importante en Reino Unido, donde existe preocupación por un incremento de la deuda del Gobierno y legisladores acusan a la autoridad fiscal británica de tratar con guante blanco a las grandes corporaciones.